Los errores más comunes de los ciclistas

LOS ERRORES MÁS COMUNES DE UN CICLISTA
No realizar un calentamiento previo.
Este es el error más común realizado por los ciclistas. Tenemos que tener en cuenta que nuestros músculos necesitan prepararse para la intensidad a la que van a ser sometidos. Con cinco minutos de rodaje suave y otros cinco minutos de estiramientos, es suficiente. Verás cómo notas resultados en el rendimiento y además evitarás la aparición de posibles lesiones.
No existe un tiempo o nivel predeterminado de entrenamiento para realizar antes de una carrera o salida. Si no que tu debes fijarte tus propias pautas en función a factores como la temperatura exterior (cuanto más frío, mas dedicación para entrar en calor), la exigencia de uno mismo, o los objetivos que quieras alcanzar.
No hidratarse lo suficiente.
A lo largo de nuestro día a día, es muy importante hidratarse antes, durante y después de cada sesión. Independientemente, de la duración de la carrera, mantener el cuerpo hidratado es imprescindible para evitar la deshidratación y una disminución del rendimiento.
Cuando hacemos deporte, nuestro cuerpo expulsa muchos líquidos a través del sudor, y con ellos sales y minerales necesarias para el organismo. Es fundamental reponerlos lo antes posible para que nuestro rendimiento no baje. Por ello debes de llevar siempre contigo una botella de agua de la que debes ir dando pequeños sorbos de forma continua. De esta forma evitarás la deshidratación, y tu cuerpo rendirá más.
No descansar.
Como todos sabemos, el deporte es bueno para la salud, pero abusar de ello puede dar lugar al sobreentrenamiento, provocando lesiones y por lo tanto empeorando nuestra salud y bienestar. Para evitar esto, descansa uno o dos días a la semana o combínalo con otros deportes de menor intensidad.
Todos sabemos que el deporte es bueno para la salud, pero abusar de ello puede dar lugar a futuras lesiones. Es mejor que descanses un par de días a la semana para rendir más los días que entrenes, que entrenar todos los días a un nivel de entrenamiento por debajo de tus posibilidades.
Ignorar el dolor.
Es muy importante saber escuchar a nuestro cuerpo para saber si todo marcha bien. Suele ser habitual no hacer caso a las lesiones por miedo a abandonar una competición o carrera. Pero hay que darle mucha importancia a este aspecto porque dejar abandonado un dolor puede provocar problemas serios. Cualquier señal es excusa para prestarle atención y dedicarle tiempo, aunque se tenga que prescindir de un entrenamiento.
Hacer siempre la misma ruta.
Es un error cometido por muchos puesto que es la opción más fácil. Pero lo que no sabemos es que a la larga pasará a ser la opción más monótona y hará que nos cansemos e incluso que abandonemos el deporte. Mantén tu motivación activa planeando diferentes rutas y proporcionando variabilidad al deporte. Lo mejor que puedes hacer es compartir estas experiencias con gente que también disfruta con el ciclismo.
No dedicar tiempo a fortalecer los músculos.
Para conseguir mejores resultados tanto físicos como profesionales, es muy importante dedicar tiempo al fortalecimiento de los músculos implicados en este deporte. Trabajar los cuádriceps, el glúteo mayor, los isquiotibiales, el triceps y los gemelos, hará que ganes en rendimientos y en velocidad.

Equipo Redacción